Ya lo decía el "Libro de la montería" del rey Alfonso XI en el siglo XIV, y hoy, cuatrocientos años después, Carlos Nores, de la Universidad de Oviedo y vicepresidente de la Fundación Oso Pardo, ha publicado los resultados de su estudio sobre osos de la Cordillera Cantábrica, en el cual confirma que las osas con crías de entre 11 y 14 meses, no hibernan. Tampoco lo hacen las crías con dos años de edad que se acaban de emancipar. A estas conclusiones ha llegado mediante el seguimiento de huellas y rastros de distintos ejemplares durante los meses que dura la estación invernal. Con ello observó, que las hembras no disminuían su actividad en dicho período; tampoco fisiológicamente, ya que comían y defecaban con normalidad. El resto de individuos mayores de dos años, incluidas las hembras sin crías, entraban en el periodo de hibernación esperado.
